Por Morpheus Misfit
InsideOut Records
Con mucha anticipación por cosas monumentales escuché por primera vez este nuevo disco de Beardfish, mas aun después de la gran crítica que nuestro compañero Marcos Codas hizo de su anterior album “Sleeping in Traffic Part 2” y viendo que éste entró entre los mejores lanzamientos del 2008. Me ha tomado una semana hacerme a la idea, simplemente por lo complejo esta pequeña joya, y es que a medida que pasan los dias me doy cuenta de que una banda como Beardfish es incapaz de sacar algo mediocre…no son del tipo de bandas que buscan exito comercial, y si asi lo hiciesen aun sacarian algo mas valioso que el resto de bandas por ahi. Valió la pena la espera, porque “Destined Solitaire” es algo enorme, que crece de a poco dentro tuyo y te revela todos sus encantos.
Todo el sonido Beardfish esta desplegado aqui: los instrumentales mesmerizantes y esa producción que hace que suenen como una banda de los setenta, ningún sonido procesado y su elección de instrumentos, la Hammond sonando fuerte y la guitarra, bajo y bateria sonando naturales: eso es Beardfish. Con esto te puedes imaginar que el sonido que escuchas en el disco es el mismo que sonaba inclusive en el estudio antes de grabarse. También siguen los pequeños guiños a Frank Zappa, especialmente en la manera de recitar las letras y ese sonido que es hace ser tan, mmm, Beardfish. Si te fijas bien incluso podras captar un poco de funk, y es que esta banda tiene bien puesta su etiqueta de “eclectic prog”, jajaja.
¿Entonces porque todo crece tan lento dentro de uno? pues principalmente ocurre esto con algunos discos porque hay demasiada música que digerir en esos 77 minutos, y resulta que en este caso no es tan inmediata como en los últimos dos discos…la melodias no son tan obvias, y es sin duda lo mas complejo que han grabado hasta el momento…pero luego de 7 u 8 escuchas resulta que no puedes dejar de poner play otra vez.
Si, muchas de las canciones son largas (cerca de los 10 min) lo cual les da mucho tiempo para hacer instrumentales, pero lo mejor se esconde en la canción que le da título al disco, “Destined Solitaire”, con tantos cambios que lo único que lo mantiene unido es la gran voz de su lider Rikard Sjöblom, eso y las 4 lineas de death metal 🙂 . Otro gran momento ees la jazzera Entropy y su solo de David Zackrisson con raices en la propia escandinavia. El único momentos mas o menos decepcionante es la instrumental “Coup De Grace”, con 10 minutos en los cuales sobran los últimos 4, que se hacen mas débiles y pesados.
Sin entrar en mucho detalle en cada canción del disco, Beardfish han llegado hasta la grandeza de su anterior disco y han sabido mantener el listón, sorprendiendo incluso a los fans del prog. Esta vez se han demandado mas y lo que consiguen es fascinar. Seria de tontos dejar pasar por alto este disco.