[Crónica] Anathema en Madrid – Sala Arena, 09/10/2014

Texto: Mariano Bacigaluppi
Fotos: Anathema

Cada nueva visita de ANATHEMA es una experiencia donde las palabras la mayoría de las veces se quedan cortas, y lo vivido la pasada noche del Jueves 9 de Octubre de 2014 no fue una excepción… La fórmula alquímica de convertir los sentimientos en notas musicales nuevamente surtió efecto en mí y en el resto de los presentes que hicieron posible un nuevo éxito de la banda británica.

La velada comenzó con los jovencísimos MOTHER’S CAKE. Banda proveniente de Austria con un sonido que bailoteaba entre el Hard Rock, el Funk, el Progresivo, el Grunge… Infinitos matices para una poderosa banda que tiene un solo disco de estudio en el mercado, Creation’s Finest de 2012, y como es obvio basaron su presentación en él. La canción que da título a su opera prima, “Creation’s Finest”, fue la que abrió el fuego y más de uno se quedó asombrado del despliegue y del poderío del trio. Muchas dosis funkies mezcladas con el más crudo Hard Rock y guiños progresivos setenteros. “I Like It” fue otra de las que sonó, rockera y rotunda de principio a fin. También nos deleitaron con “Soul Prison” donde el Funky, al más puro estilo de LIVING COLOUR o EXTREME, volvió a sacudir a toda la sala y con el vocalista Yves Krismer dejándose la garganta en cada estrofa. Para el final dejaron esa joya llamada “Runaway”. En esta canción al bajista Benedikt Trenkwalde habría que canonizarle ya que el trabajo que hace es realmente indescriptible y de una altísima calidad.

Lo que todos estábamos esperando estaba a punto de comenzar… Los hermanos Cavanagh, los hermanos Douglas y el portugués Daniel Cardoso pasadas las nueve de la noche aparecieron en el escenario y la magia comenzó. Eso sí, es digno de notar que durante más de medio concierto Daniel Cardoso se encargó exclusivamente de la batería dejando relegado a un pequeño set de percusión. Como todos sabéis dicha gira de la banda inglesa servía para presentar su último trabajo discográfico, Distant Satellites, y como era de imaginar basaron en gran parte su setlist en él, eligiendo lo que curiosamente son para mí las mejores canciones contenidas en el CD. Así que lo primero que nos ofrecieron fueron las dos primeras partes de “The Lost Song”. La sincopada batería de Cardoso se iba fundiendo lentamente con los teclados ejecutados por Daniel Cavanagh, pero sin duda alguna lo más llamativo eran las delicadas y sensibles voces de Vicent Cavanagh         y Lee Douglas como se entrelazaban entre sí.

ana1La banda seguiría con otras dos partes y ésta vez de la canción “Untouchable”. ¿Cómo describir esto? Creo sin lugar a dudas que es la canción que le pondría a alguien que me preguntara ¿A qué suenan Anathema? Es el perfecto compendio de lo que es la banda, la perfección que alcanza en cada una de sus acordes y, a su vez, en la segunda de las partes como la armonía se hace sencillez, los sentimientos música y el colapso íntimo y conmovedor está al borde de aparecer. La voz de Lee Douglas, acompañada de Daniel Cavanagh a los teclados, lo hace posible, hace que el hechizo se vuelva realidad…

“Thin Air” fue la elegida para proseguir y la que preparó el terreno para el momento ilustre de la noche. Desde el mismo momento que escuché “Ariel” inmediatamente me enamoré de esa canción y no sólo la elegí como la favorita de su último CD, sino como una de las mejores canciones que creo que la banda ha compuesto en toda su carrera. Al final de esta crónica podréis comprobar de lo que hablo…

La tercera parte de “The Lost Song” sería la siguiente en sonar y seguidamente “Anathema”, ambas con una buena recepción por el público presente. Entonces llegaría otro de los momentos cumbres de la noche. “The Beginning And The End” es otra de esas piezas llenas de encanto y naturalidad que dispara directamente hacia los sentimientos de los escuchas. Asombrado unos minutos después de finalizada el propio Daniel Cavanagh se emocionó diciendo que había escuchado como durante el solo de guitarra, ejecutado por él, había escuchado como alguien del público cantaba ese propio solo, coreándolo… ¡MAGIA ABSOLUTA!

Para “Universal” la banda pidió que se emulara lo vivido en su último DVD, es decir, los móviles de todos los presentes haciendo un collage lumínico grandioso. Vivimos otro grandísimo trance con “Closer” donde la gente prácticamente agotó todas sus últimas fuerzas batiendo palmas hasta el hartazgo. Y así fue como la banda se retiró del escenario, aunque esto sería por muy poco tiempo…

Volverían con otra canción de su último CD, con la previa intro de “Firelight” llegaría “Distant Satellites” donde la electrónica sería el bastión fundamental de su sonido. Ya todos sabíamos que con los primeros acordes de “A Natural Disaster” el final estaba cerca y una nueva magnífica y sublime muestra del poderío vocal de Lee Douglas y Vicent Cavanagh. Todavía quedaría un as más debajo de la manga…

Ese as no fue otro que “Fragile Dreams” y nada menos que al principio con los previos acordes de “Shine On You Crazy Diamond” de PINK FLOYD. La sala literalmente se vino abajo ante tal magna muestra de fuerza y energía de la banda inglesa. Fue coreada de principio a fin por todos los presentes, agotando los últimos cartuchos en las ya maltratadas gargantas.

Punto y final para un nuevo concierto de sobresaliente de ANATHEMA y donde nos les basta con alcanzar la perfección, sino que la siguen manteniendo y reproduciendo día a día.