[crónica] Kristonfest 2019 – Sala Mon & Sala La Riviera, 10 y 11 de mayo de 2019

Texto: Morpheus Misfit
Foto: Unai Endemaño @unaiendemonium

La organización del Kristonfest nos dice que la edición de este año ha sido la más exitosa de todas, y no es cosa del azar o de la casualidad. Hubo un largo camino desde que el festival se celebraba en otra ciudad y llegase a Madrid, con diferentes apuestas en sus carteles y diferentes estilos, pero parece haber encontrado un nicho perfecto: algo que se mueve entre el rock y el stoner.

El éxito no se mide solo en asistencia, que también, sino en cosas como convertirse en un festival de referencia para este público, que ya marca en sus agendas ese fin de semana de mayo para acudir al culto de la música que nos trae en cada ocasión Noise On Tour. Si los dos útimos años han decidido marcarse en una linea mucho más cercana al stoner, en este 2019 era el rock quien predominaba, con nombres como The Hellacopters, Kadavar, o Earthless. Otra de las novedades de esta edición fue la incorporación de un día más, pasando a ser viernes y sábado en salas diferentes.

Lastimosamente no pudimos llegar para ver a Arabrot ni a Nick Oliveri con sus Mondo Generator el viernes en la sala Mon de Madrid, aunque los que pudieron presenciarlo nos hablaron maravillas tanto de los noruegos como de los americanos (mucho más resultones en versiones de Kyuss o QOTSA), pero si podemos confirmar que lo de Earthless no fue de este planeta. Esa mezcla de kraut rock y heavy blues en manos de solo 3 personas, en una sala que se prendió a su apuesta desde el inicio y con un calor exasperante, nos mandó a la luna desde la inicial “Uluru Rock” hasta esa versión final a pedido del público que no quería dejar de escuchar los solos de guitarra de Isaiah Mitchell.

Lo que parece ser una banda precisamente de eso, de guitarras, perdería todo sentido sin el acompañamiento de Mike Eginton al bajo, pero sobre todo de Mario Rubalcaba a la batería, que en la noche del viernes nos regaló un despliegue no solo de groove sino de técnica y de pasión. Hace que todo suene bien y compacto, y también que no nos aburramos cuando Isaiah lleva 4 minutos haciendo un solo interminable con el que nos dejamos llevar con unos punteos limpios muy herederos de Hendrix.

Su nuevo “Black Heaven” del año pasado recibió jams improvisadas que extendieron cada canción un par de minutos más, en una banda que no miró para nada el reloj pero sí por la calidad de esa psicodelia instrumental que se interrumpió en momentos puntuales con la voz de Mitchell. El resultado es que nadie quería irse, ni la banda ni el público, que incluso llegó a lanzarse desde el escenario y arrancarse en pogos. No se exactamente como les habría ido a Arabrot y Mondo Generator en cuanto a respuesta de público, pero Earhtless pusieron la sala Mon a sus pies.

EARTHLESS SETLIST

Uluru Rock
Black Heaven
Electric Flame
Gifted by the Wind
Godspeed
Cherry Red (versión de The Groundhogs)

SÁBADO 11 DE MAYO

La Riviera no es un sitio exento de polémicas, pero también es cierto que en cuanto a grandes ocasiones es de las más solicitadas. No todas las bandas suenan bien allí, y puede depender de muchos factores no precisamente relacionados a la sala, pero si en algo ha destacado esta edición del Kristonfest ha sido en mejorar el sonido de la edición anterior. Fue algo muy comentado entre los asistentes en los descansos entre banda y banda, y es que en este Kristonfest todas las bandas han sonado excepcionalmente bien.

Cerca de las 20:00 arrancaban los de Nottingham, y si alguien fue al Kristonfest sin haber escuchado antes a CHURCH OF THE COSMIC SKULL seguramente se llevó una gran sorpresa. Se definen a sí mismos como una banda de psych prop pop, y lo que vimos encima del escenario el sábado es lo más cercano a ABBA que verás en un festival de este tipo. No lo decimos a mal, los ingleses lo hicieron realmente bien, pero era bastante chocante empezar con esa especie de canciones de domingo en una iglesia del sur de EEUU (se definen también como un culto espiritual), así como ver durante toda la actuación a un violinista a un costado del escenario, ya que el violín no se escuchó ni un solo segundo de toda su actuación.

El peso de las voces y el instrumental recae casi en su totalidad en su guitarrista Bill Fisher, que con su cálida voz y sus melosas composiciones cercanas al heavy psych ponía el punto más abrasivo de la música, a la que las coristas Jo Joyce y Caroline Cawley llenaban de purpurina y colores chillones, pero nada superaba al Hammond del teclista Michael Wetherburn, sin duda el más animado de toda la formación y quien se vino arriba al ver que la gente respondía a esas canciones. Buena introducción en España, no dudo que repetirán pronto.

CHURCH OF THE COSMIC SKULL SETLIST

Mountain Heart
Black Slug
Sorcery
Science Fiction
Is Satan Real?
Go By The River
Watch It Grow
Evil in Your Eye
Timehole (Gonna Build A Rocket Tonight)
Cold Sweat
Revolution Comes With An Act Of Love
Magic

Bajo el ala de Sound Of Liberation llegaban DOZER, la banda más abiertamente “stoner” de todo el cartel aunque lo suyo coquetea y mucho con el rock alternativo. Llevan en activo desde mediados de los noventa, de una época en la que el rock desértico no era una moda que llevar en una camiseta o en Instagram, y esa experiencia se nota en su directo. No necesitan grandes producciones encima del escenario, no necesitan confetti ni explosiones, ni una gran teatralidad, solo se valen de buenas composiciones como bien se podría ver en la actitud de su frontman Fredrik Nordin, que hizo gala de la fama escandinava y con pocas palabras para el público decidió dar rienda suelta a un setlist muy resultón.

Todo lo contrario de su guitarrista Tommi Holappa, totalmente enchufadísimo en canciones como “Rising” y que tocaba no solo para el público sino para sí mismo al sentir la música muy muy dentro. Lástima que fue justo en este apartado que a la banda le faltó potencia, porque aunque sonaban bien les faltaba algo de punch en el resultado final. No estoy seguro si su técnico de sonido les acompañaba, pero apostaría a que no y que ello llevó a que aunque dieran un show correcto no fuese realmente sobresaliente.

Se notó especialmente cuando KADAVAR salieron a escena, porque la Riviera se iba a venir abajo con tanta potencia. Es realmente increible el status que han alcanzado los de Berlín con solo cuatro discos, y con este “Rough Times” se han colado en los carteles de festivales del estilo en toda Europa. Su retro rock muy heredero de los 70´s gusta bastante, las pintas vintage consiguen darle ese toque de autenticidad, pero no nos engañemos porque es el carisma tanto de su baterista Tiger como de su guitarrista y vocalista Lupus Lindemann (quienes se disputan el puesto de líder de la banda) es lo que termina de enganchar.

Si el sonido te acompaña solo hace falta echarle los condimentos necesarios y las composiciones tan pegajosas de canciones como “Tribulation Nation”, “Die Baby Die” o “Vampires” para meter al público en un trance que bailaba al ritmo de los movimientos extraños del larguilucho Tiger. Puede que sea una pose o no, pero nadie puede negar que tienen talento y son bastante apasionados en lo que hacen. Quizás se haya hecho un poco largo entre tanta improvisación, pero fue de lo mejor que pudimos ver…hasta que salieron los siguientes.

KADAVAR SETLIST

Skeleton Blues
Vampires
Living in Your Head
Into the Wormhole
Tribulation Nation
Eye of the Storm
Forgotten Past
Purple Sage
Come Back Life
Doomsday Machine
Thousand Miles Away From Home
Die Baby Die
Black Sun
All Our Thoughts

Muchos recordarán el setlist que dieron THE HELLACOPTERS como el mejor desde su regreso, y no es para menos porque hasta Nicke Andersson estaba flipando con la reacción de la gente en Madrid. Un público repleto de turbojugends y fans del rock n´roll sueco más crudo, gente que llevaba mucho tiempo esperando algo así en sala, porque su actuación el año pasado en el Download Madrid fue correcta pero no tan sudorosa e íntima como en la Riviera. Fue tanto así que hasta Dregen estuvo correcto y cedió su protagonismo al resto de la banda, ya que pocas semanas antes había tenido su momento en la gira de Backyard Babies.

Nicke Anderson estuvo sublime, tanto en guitarra como en voz, tanto en puesta en escena como en carisma, y hasta en humildad porque aunque todos los ojos estaban fijados en su figura, decidió regalarle todos los aplausos al teclista Boba Fett. Un Robert Eriksson muy correcto a las baterías nos hizo de motor a gasolina entre clásico y clásico, dándole una agresividad muy jugosa especialmente cuando interpretaban canciones del Supershitty To The Max! ¿Y Kenny Håkansson? Pues siendo él mismo, oculto entre las sombras. La violencia y felicidad se palpó en las primeras filas del concierto, nadie descansó un solo momento y todos vibraron a la par que caían himnos en casi 2 horas de actuación. Ni Johanna Sadonis a un costado del escenario podía quedarse quieta.

THE HELLACOPTERS SETLIST

Hopeless Case of a Kid in Denial
Alright Already Now
Carry Me Home
You Are Nothin’
Born Broke
Like No Other Man
The Devil Stole the Beat From the Lord
My Mephistophelean Creed
Ghoul School
No Angel To Lay Me Away
Toys and Flavors
Down on Freestreet
Long Gone Losers
No Song Unheard
Psyched Out & Furious
Before the Fall
Soulseller
By the Grace of God
I’m in the Band
(Gotta Get Some Action) Now!

Y nos quedaba el postre, los ingleses TURBOWOLF, que pusieron toda la sala patas arriba aunque gran parte del público se marchó tras la actuación de The Hellacopters. Eran cerca de las 2 AM pero la fiesta no acababa aún, porque su vocalista Chris Georgiadis decidió echar gasolina sobre unas chispas que se intensificaban cada vez que se arrojaba sobre los sintetizadores o hacía eclécticos bailes pidiendo a la gente que salte, una y otra vez.

El público respondió a canciones tan fiesteras como “Ancient Snake” o “Rabbit´s Foot”, y es que aunque solo lleven en activo desde 2011, los de Bristol saben perfectamente que necesitaban entrar a matar cuando su público llevaba de pie desde las 20:00. El tándem Chris Georgiadis y la bajista Lianna Lee Davies nos regalaron gratos momentos, y aunque su sonido fue de lo más guarro del festival, sus canciones pedían justamente eso. Solo puedo imaginar la que pueden liar en un festival al aire libre con el sol dándoles de lleno.

TURBOWOLF SETLIST

Cheap Magic
Ancient Snake
Solid Gold
Very Bad
Domino
A Rose for the Crows
Rabbit’s Foot
The Big Cut

Y así se acababa la que llaman la edición más exitosa del Kristonfest. Lo entendemos, lo fue, y no por la gran convocatoria sino porque ya le tienen el punto cogido para hacer que todo esto más que un par de directos reunidos en un buen cartel sea una experiencia que queramos repetir una y otra vez. Han conseguido que la gente empiece a contar los meses que faltan para que anuncien la próxima fecha, las primeras confirmaciones, y planear su viaje a Madrid. Esto, señores, no se consigue de la noche a la mañana.