[crónica] Nashville Pussy en Sevilla – Sala Fanatic, 15/02/2014

February 17, 2014

Texto: Morpheus Misfit
Fotos: Jose A. Garcia

Set-list

Keep On Fucking
High As Hell
Struttin Cock
Wrong Side Of A Gun
Rub It To Death
She´s Got The Drugs
I´m so high
Everyone´s Fault But Mine
Drunk Daddy
Up The Dosage
Go To Hell
Milk Cow Blues
I´m the man
Why
Go Motherfucker Go
You´re Going Down

Si de rock n roll sucio, crudo y altamente sexual se trata, Nashville Pussy son palabras mayores y eso todos lo sabemos. “Up The Dosage” los trae de vuelta al terreno en el que se sienten mas cómodos: el rock n roll de corte cómico en las líricas y alto en cuanto a guitarras. Ninguno de los que estuvimos presentes en la sala Fanatic de Sevilla podemos negar que aquello fue una fiesta total.

La duda estaba en el aire, y es que días anteriores Blaine habría sufrido una caída en Madrid supuestamente producto de una de sus borracheras, por lo cual estabamos ansiosos de ver si llegaban en buena forma a su fecha andaluza, pero luego de ver el mismo espectáculo (la caída de Blaine en medio de una canción, el socorro de uno de los roadies y su posterior recuperación como Dios del rock n roll) en Sevilla ya suponemos que se trata de otra parte mas del show.

¿El sonido? Estuvieron luchando los primeros segundos para hacer funcionar sus micrófonos, ya que ninguno de los tres parecía esta encendido, pero luego de un tirón de orejas consiguieron hacer que funcionasen y escupiesen fuego. De todas maneras no fue hasta la tercera o cuarta canción que Ruyter no se sintió cómoda con el sonido de su guitarra, incluso instruyendo a su roadie para que moviese uno de los P.A. en otra posición. De todas maneras, una vez pasada la quinta canción, aquello sonaba como un antro de los auténticos, y orgullosos hubiesen estado AC/DC o cualquier banda de rock sureño bañado en cerveza.

La banda estuvo muy receptiva a pesar de las primeras caras largas de Blaine, Ruyter estuvo fantástica a la guitarra y muy entregada en cada solo (barridas en el escenario, sonrisas al público, poses para las fotos) y Bonnie en su linea al bajo, anunciando cada canción en español por order de Blaine. Quizás el menos expresivo fue Jeremy, su batería, realizando su trabajo de manera correcta y esperando ya otra parada mas en la gira.

Nadie salió decepcionado del concierto, fue una alta dosis de riffs y de cánticos borrachuzos, y por sobre todo pudimos ver que Nashville Pussy siguen en buen estado de forma. Ni viejas glorias ni banda cansina en directo, son unas jodidas estrellas del rock n roll que hace esto todavía por amor a la fiesta y al desfase. Es la sensación que dan, especialmente cuando al final del show Ruyter baña a todos los presentes en la primera fila con cerveza luego de entregarnos “You´re Going Down”.