Texto: Daniel Claudin
Fotos: Daniel Claudin
Obsidian Kingdom llegaron como lo hacen habitualmente, sin tener capacidad de saber qué miembros de la formación van a aparecer sobre el escenario a no ser que sigas sus redes sociales al día.
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Sin mediar palabra (imagino que para que el público no se diese cuenta de que son españoles) y con la fuerza de Hasbulla, igual que aparecieron sobre el escenario se fueron, oscureciendo el ambiente al poco público que había en la sala hasta ya pasada más de media hora del inicio de su concierto.
Después de aproximadamente 45 minutos de concierto de los catalanes, la sala se preparaba para el desembarco de la oscuridad inglesa (lo de oscuridad es literal).
Comenzaron con una puntualidad inglesa (obvio, son ingleses) y a las 21:00hs comenzaba a sonar el inicio de Enchantment, un tema que lleva acompañándoles 27 años ¡se dice pronto! (veintisieteaños).
Forsaken era la primera de las canciones que habían visto truncado su éxito en directo por la pandemia, al haber salido el disco que la contiene, Obsidian justo cuando arrancaba todo el percal, lo que no impidió que el público la cantase junto a la banda.
Blood & Chaos, Faith Divides Us – Death Unites Us separaron épocas con lo que venía después, Eternal, a la que Holmes presentó como “and old tune from the 90’s” (razón no le falta) para rápidamente recuperar la tranquilidad con One Second.
Sin pausa pero sin prisa, el paraíso perdido continuaba su rumbo hacia lugares más oscuros (y más nuevos) con Serenity, donde perdieron a parte del público, al que no le costó reengancharse cuando comenzó a sonar la notanvieja pero mítica The Enemy.
Volviendo a su último lanzamiento arrancaron con The Devil Embraced justo antes de recuperar el hit The last time que puso como loco al público que se agolpaba en la mítica sala Bilbaína. Eso no era todo, aún les quedaba algo de munición en el cartucho y pensaban gastarla: No hope in Sight y Say just words fueron las últimas en sonar antes de que el grupo se retirase.
Con el bis preparado (como en el resto de la gira, parece que no han variado los setlist) se guardaban lo mejor para el final, como suele ser habitual en este tipo de cosas. Darker Thoughts, arrancada en solitario por Holmes para la parte inicial del tema y continuada por la banda al completo que se subieron al escenario para cerrar el concierto con Embers Fire y Ghosts.
