[crónica] Peyote Fest – Sala Republik, Madrid – 07/06/2014

Texto: Morpheus Misfit
Sala: Republik (Madrid)
Promotor: Peyote Producciones

El Peyote Fest es un festival que arrancó el pasado jueves 5 de junio en Madrid (y al cual lastimosamente solo pudimos acudir el día sábado) con una propuesta bastante interesante dentro de lo que se cuece dentro del stoner rock y el rock espacial (no por nada éste día se titulada “Space Day”). Es de aplaudir iniciativas como éstas, que dan oportunidad a bandas emergentes tanto de nuestra escena como a bandas internacionales que con 1 o 2 discos salen al exterior a comerse el mundo.

El sitio elegido fue la céntrica y pequeña sala Republik de Madrid, que sirvió de ambiente perfecto para la fraternidad que se respiraba en la sala (con aforo casi lleno para cuando las dos bandas norteamericanas realizaban su show). Con un escenario pequeño y unas luces modestas pero efectivas, estaba todo listo para que la distorsión se apoderase de los cuerpos de los presentes y Crimson Stone diese inicio a su show.

 10373690_826110387399053_4058572896327065788_n[1]CRIMSON STONE son una banda de stoner y rock duro de Las Palmas de Gran Canaria que actuaron en el festival gracias a la plataforma de Canarias Crea y a Peyote Producciones, trayendo todo el arsenal desde las islas para arrancar con el festival. Lo suyo son riffs gordos y mucha actitud, para canciones infusionadas de una mezcla de groove y stoner que respira a Sur por todos lados, como si se hubiesen criado en el propio Texas bajo una humareda de aliño.

Salieron a darlo todo, se notaba en su actitud, y no defraudaron con canciones como “Born To Be Fine”, “Whiskey Rivers” o “Crimson Rock”. Vienen dando caña desde 2005 y eso se nota en las tablas, en un show relajado pero energético y con unas influencias “satánicas” que enamorarían al propio príncipe de las tinieblas.

Los siguientes fueron FUNGUS, banda de Madrid que nos trasladaron al desierto y al espacio con su especial rock de alto voltaje y lleno de sintetizadores que dieron el toque “space” al día. Lo suyo es bastante atrayente, con un bajista frontman que no necesita hablar mucho para convencer de lo suyo, y con una sección de percusión increíble que contagia a todo el que se ponga por delante.

El grupo con un solo guitarrista llena toda la sala, y vaya guitarrista que son simples pero efectivos riffs distorsionados (y ciertos punteos) nos lleva a un viaje a otra era. También se notaba ese toque psicodélico, y con canciones como “Change Your Mind”, “Space Seat” o “Cosmonauts” sin duda validaron su lugar como gran reclamo de este festival.

mothershipLlegaba el turno para MOTHERSHIP, la primera de las dos bandas de Texas que cerraba su gira europea con este festival. Su suyo, aunque con toques de stoner rock por aquí y allá, quizás se acercaba mas a un rock n roll influcionado de heavy prehistórico que fue aclamado por todos los presentes ya con una sala abarrotada. Diría que su show se comió con patatas a todos los presentes en el cartel, y es que el público presente los disfrutó como unos cabezas de cartel.

La banda puso lo suyo, animó y jugó con el público como quizo. El resto fue la excelente música que facturan, sin ser demasiado técnicos entregan una alta dosis de guitarreo y voces limpias que encantan por su simpleza y efectividad. Tatuajes y ríos de alcohol corren a través de canciones como “Hallucination”, “Cosmic Rain” o “City Nights” (una de las últimas). Excelente muestra de todo lo que puede dar este género.

wo fatYa solo nos quedaban los grandes WO FAT, y vaya si dieron un espectáculo a la altura de lo que se esperaba. Empezaron algo frios y con ciertos problemas con el PA (que al parecer estaba demasiado alto para la guitarra principal), pero supieron solventar estos problemas pronto para seguir dando una lección de como se factura stoner rock del bueno.

Arrastrando esos riffs y esos pocos alaridos por donde podían, lograron arrancar al público en pogos y en cánticos, especialmente con enormes canciones como “Descend Into The Maelstrom”, “Enter The Riffian” o “Manchurian Syndrome” con la cual llenaron la sala de éxtasis y psicodelia. Eran la banda mas experimentada del cartel y eso se notó en su actuación y su profesionalidad. Volvieron hasta en dos ocasiones para dejar contentos a todos, incluidos los organizadores.

Al final un gran resultado el final de este prometedor festival, con una gran organización y con un cartel muy interesante, logrando un gran sonido para todas las bandas y consiguiendo una afluencia positiva para el tipo de evento. Sin duda pensamos repetir en su próxima edición.