Por X.F. Remorse
1-Pensavientos
2-Luz roja
3-Caperucita feroz
4-Despierta
5-Ciudad esperanza
6-Si te vas
7-Nueva vida
8-Sweeney Todd
9-Carta al barquero
10-Por si sirve de algo
11-Amanecer
Miembros
Martí Dòria-voz
Víctor Vázquez-guitarra
Laura Moral-guitarra
Lluís Ripollès-bajo
Pep Rovira-batería
Sello
Autoproducido
Website
www.doriaoficial.com
Con muchas ganas acaba de publicar su álbum debut el grupo catalán Döria, y decimos esto porque la presentación a la prensa fue todo un alarde de profesionalidad pero, a la vez, de humildad por parte de los músicos, quienes recibieron a los redactores especializados llenos de agradecimiento (pocos discos debuts llaman tanto la atención) pero a su vez convencimiento (de quien cree en su producto y desea darlo a conocer).
La pre-escucha, como decimos, fue en un ambiente totalmente profesional, en un entorno perfecto para la audición, en Home Digital Systems de Barcelona y con el equipo más alto de gama de la marca escocesa LINN, que proporcionaba un sonido perfecto. Hablando propiamente del álbum, nos encontramos con un buen trabajo de hard-rock, potente y a la vez elegante. Diría que este es el mayor mérito de la banda, una interesante combinación de un hard rock melódico y elegante pero con un sonido y una producción consistente y con muchos detalles totalmente metaleros, especialmente en los solos de guitarra, que sin duda es de lo más destacado del redondo.
El álbum se abre con una breve pieza instrumental, para dar paso al track número dos, de título “Pensavientos”. Este tema es muy definitorio del estilo del grupo, con un puente pegadizo y un estribillo con coros, coronado por un solo de guitarra muy destacable, a manos de la joven Laura Moral, una gran sorpresa sin duda. El siguiente corto, “Luz Roja”, es un medio tiempo en cuya primera parte de la primera estrofa domina el bajo, para dar paso a la entrada de guitarras en la segunda vuelta seguida de un puente ralentizado. Igual que en el anterior tema, cada frase del estribillo se inicia con unos coros, lo que da algo de sensación de repetición.
“Caperucita feroz” contiene unas guitarras “duras”, muy heavys, siendo de los temas más “movidos”. Posee un buen estribillo y un muy interesante solo que, gracias al efecto de “wah-wah”, está perfectamente adaptado al estilo de la canción y encaja muy bien.
“Ciudad esperanza” es el tema más rápido del álbum, y sin duda a estas alturas se echaba en falta algo de velocidad. Es seguramente el tema más heavy y contiene buenos solos de ambos guitarristas. El siguiente corte, “Si te vas”, es la balada del disco, que se inicia con unas guitarras acústicas, mientras que “Nueva vida” vuelve a presentar riffs “duros” con las cuerdas tapadas y que contrasta con las notas largas de la estrofa. Buen tema, pero con un “pero”: el tono de la voz es quizás demasiado “suave” en contraste con la agresividad de las guitarras.
“Sweeney Todd” es otro tema “cañero”, que tiene más de “heavy” que de hardrockero y que gustará a los seguidores de ambos estilos. “Carta al barquero”, en contraste, se inicia de una forma baladística, aunque luego se endurece para introducir un puente que destaca mucho respecto a todo el estilo del disco; es un muy buen riff que, por desgracia, desemboca a un estribillo demasiado parecido al de los anteriores temas. El álbum acabará con dos temas definitorios del estilo de esta joven formación, “Por si sirve de algo”, con un punto épico combinando la caña de las guitarras y la melodía de la voz, y finalmente “Amanecer”, balada a piano interpretada por Núria Malapeira.
En definitiva, buen disco debut de esta banda que llega con muchísimas ganas. Quizás repita demasiado el mismo tiempo (hasta el cuarto tema no empieza a haber algo de “movimiento”, mientras que también los riffs pueden pecar de repetitivos además de que la voz se mantiene siempre demasiado “suave”, ofreciendo en demasiadas ocasiones el mismo tono cuando a veces las guitarras demandan algo de agresividad. Por otro lado, éstas ofrecen unos solos muy destacados y netamente heavys y que sin duda es de lo mejor del álbum. A pesar de estos pequeños inconvenientes (especialmente el de la voz, algo repetitiva), Döria han sabido crear un disco de producción contundente pero realizado con sumo gusto.