[reportaje] 25 aniversario del primer y único concierto de RATM en Andalucía

Texto: Jorge Fretes
Fotos: Alejandro Vallejo y Roi

Martes 8 de julio del año 1997, Palacio de Deportes de Granada. Entrada de 2500 pesetas en la mano para ver a Rage Against The Machine en su gira ‘Evil Empire’, en lo que sería la primera vez de Zack De La Rocha y los suyos en Granada…y también la última hasta la fecha.

La primera fecha anunciada fue la del martes 10 de junio de 1997 y los teloneros eran Hamlet presentando ‘Revolución 12.111’. Aunque aquel concierto se suspendió en el mismo día por problemas vocales de Zack De La Rocha, se anunció otra fecha el 8 de julio de 1997 (al día siguiente actuaban en el Doctor Music Festival) que si se realizó y que quedó grabada a fuego en la memoria de todos los asistentes. A falta de videos, hemos conseguido testimonios y fotos de personas que fueron de Málaga a Granada a vivir algo único. Dejamos que hablen los recuerdos.

Testimonio de Salva Moreno

Corría el año 97, yo tenía apenas 24 años recién cumplidos y junto con un amigo nos escapamos a Granada para ver un concierto de los Rage Against The Machine. Uno de los grupos de rock del momento. Los teloneros fueron Hamlet. Aquel concierto aún lo recuerdo como el más brutal al que jamás he ido.

El conductor de autobús tuvo que parar 4 ó 5 veces desde Málaga a Granada porque se sentía mareado de tantos porros que se estaba fumando dentro del autobús. Añadir que también corrían rondas de chupitos de Jack Daniels entre los asientos. Menudo desmadre de autobús. Fue verdaderamente una situación ahora irrepetible.

El concierto fue bestial. Aguantamos las primeras 5 ó 6 canciones en la parte cercana al escenario, entre empujones, patadas y avalanchas. La gente se subía al escenario para luego tirarse a lo Tarzán sobre el público. Había chicas, tetas al aire, en hombros, peña metiéndose rayas en los asientos de grada del Palacio de los Deportes, alcohol y porros de boca en boca. Nosotros nos fuimos a una de las barras a tomarnos unas cuantas cervezas para recuperarnos un poco.

Durante el concierto Zack de la Rocha -el cantante-, se lanzó sobre el público y un negro con dimensiones de armario empotrado bajó para devolverlo al escenario repartiendo hostias a tutiplén. Afortunadamente, ya estábamos sentados en la grada. Un espectáculo.

Cuando terminó el concierto tuvimos que esperar más de dos horas para volver, porque más de uno volvió escayolado, cojo, o con un vendaje en la cabeza. El parte de heridos no fue corto. Lo aseguro. Volvimos la mitad

Publicación original en este enlace.

Testimonio de ROI

En junio de 1997, cuando tenía 17 años, recuerdo que me dijeron que Rage Against The Machine, esos mismos que eran responsables de himnos tales como “Killing in the name” y “Bulls on Parade”, iban a tocar en Granada. En una época en la que no existía Internet ni plataformas digitales, en la que la música rock se descubría en los bares, gracias al intercambio con amigos y que gracias al éxito de Nirvana empezaba a abrirse un hueco en la radio y en canales de TV por satélite temáticos… tener la oportunidad de tener al grupo californiano tan cerca de Málaga era casi inimaginable.

Yo estudiaba 3º del desaparecido BUP y el concierto era el fin de semana antes de un examen final de Biología, odiaba la Biología, en realidad lo odiaba todo porque estaba cursando ciencias puras y mi verdadera vocación era, como descubriría más adelante, las letras (soy Periodista). Así que como buena estudiante responsable, no quise torturarme mucho y simplemente dije que no iba. Pero, por suerte para mi (y desgracia para otros), el concierto se suspendió por enfermedad del cantante, Zach de la Rocha, hasta nuevo aviso. La fecha definitiva fue en julio y ahí sí ya no había exámenes ni nada, solo necesitaba el permiso de mi madre que no era cosa fácil.

Por primera vez me dejó salir de Málaga para ir a un concierto. Fui con unos amigos de Torre del Mar y de Vélez Málaga, uno de ellos tenía una furgoneta y allí nos metimos unos cuantos, el resto llegarían en otro coche. Estaba encantada. Una vez allí, horas antes del concierto, en pleno mes de julio y con un calor de justicia, sentados en las inmediaciones del Palacio de Deportes de Granada, mis amigos vieron pasar a los integrantes de Hamlet quienes actuaban como teloneros. A mi no me gustaba el rock en español, decía que me parecían “albañiles con guitarras” pero, con el rollo de que era la única chica me mandaron a pedirles una foto. Cuando J. Molly empezó a hablar conmigo de manera afectuosa, se pusieron celosos (no se si de Molly o de mi, jajaja) y empezaron a gritarme “falsaaaa” y a contarles a los madrileños mi opinión sobre el rock patrio.

Por fin llego la hora, serían las 21,00 de la noche o así, entramos en el palacio, nada de gradas, nos bajamos directamente a la pista, aquello estaba muy lleno. No pudimos acercarnos demasiado al escenario pero estábamos un poco más cerca de la mitad delantera. Comenzó Hamlet y, de repente, la gente se volvió loca y la marea humana me arrastró en un abrir y cerrar de ojos hasta el fondo de la pista. No me atreví a volver, vi el concierto desde allí, la verdad es que el sonido de Hamlet me parecía más internacional que el de los grupos españoles que escuchaban mis amigos, tipo Extremoduro o Reincidentes. Desde entonces me convertí en fan de Hamlet pero, no olvidaba por qué estaba allí.

Así que tras unos 45 minutos, por fin, Tom Morello y el resto de los RATM subieron a la tarima, detrás de ellos, una bandera norteamericana colgada al revés, y escrita en ella el 666. El concierto duró más de una hora y media en la que no se bajó la intensidad ni un segundo y en el que les dio tiempo a repasar las canciones más conocidas de su primer disco homónimo: “Take the power back”, “Bullet in the head” o la archiconocida “Killing in the name”; también hubo tiempo para los temas de su disco Evil Empire: “People of the Sun” o “Bulls on Parade”, entre otros.

A media noche salimos del estadio sudando, eufóricos y con ganas de volver a casa para poder descansar y rememorar en nuestra almohada el momento histórico e irrepetible que acabábamos de vivir… era el principio de una época dorada del rock duro y de sus derivados, de festivales musicales potentes y de Granada y Madrid como parada obligada de los máximos exponentes del género. No había móviles, ni Instagram ni nada de eso, así que lo mejor que podías hacer era disfrutar del momento y, como mucho, echarte alguna foto con tus colegas, para pegarla en la pared de tu cuarto e impresionar a las visitas…

Testimonio de Alejandro Vallejo

Fue el primer concierto realmente grande al que fui, la movilización de gente y el ambiente fue algo bestial. Media Málaga estaba en ese concierto, todos con la ilusión no solo de ver a RATM sino tambien a Hamlet presentando su disco Revolución 12.111. Recuerdo que fueron varios buses de Málaga para Granada, cuando llegamos al Palacio de Deportes ya antes de bajarnos del autobús vemos a gente sentada en unas escaleras haciéndonos gestos de NO, NO con los dedos. Pensábamos que no nos querían allí o que nos iban a pegar, ya al bajarnos nos contaron que Zack De La Rocha estaba afónico y había cancelado la fecha. No había redes sociales, no había teléfonos móviles y nadie se enteró de la cancelación hasta que llegamos allí.

La rumorología de la época apuntaba a que Zack De La Rocha se había ido de juerga la noche anterior y se había quedado afónico, no se si fue un bulo pero es lo que todo el mundo decía. Pronto se anunció una nueva fecha, a la que también fui, y vi el concierto desde las gradas. Fue un concierto muy movido y muy mítico, otra cosa no pero RATM siempre han movido mucha gente y siempre sus conciertos han sido intensos. Cuando acabó aquello fuimos a un bar jebi de la zona, no estoy seguro si ya se llamaba Rainbow entonces pero estaba en la misma ubicación.

* Rage Against The Machine deberían haber vuelto a Andalucía en septiembre de este año para actuar como cabezas de cartel del festival Andalucía Big Festival de Málaga, pero toda su gira europea fue cancelada por lesión de Zack De La Rocha.