[review] Insomnium – Shadows of the Dying Sun

Por Iñigo Dominguez Diaz

Markus Vanhala – guitarras
Ville Friman – guitarras, voces limpias
Niilo Sevänen – bajo, voces harsh
Markus Hirvonen – Batería

1. The Primeval Dark
2.While We Sleep
3.Revelation
4.Black Heart Rebellion
5.Lose To Night
6.Collapsing Words
7.The River
8.Ephemeral
9.The Promethean Song
10. Shadows Of The Dying Sun

Sello
Century Media Records

Web
www.insomnium.net

Cuando nos referimos al death melódico, siempre se nos viene a la cabeza el sonido Gotemburgo (In Flames, Dark Tranquillity) of Children Of Bodom como representantes fineses. Pero éste es un sonido que ha evolucionado por muy diferentes vertientes, no tan conocidas por el gran público. Una de ellas es la introducida por los ya veteranos INSOMNIUM, un death melódico con influencias muy palpables del gothic y el doom metal, dependiendo del LP al que hagamos referencia, de los seis con los que han editado teniendo en cuenta el que nos ocupa, sexto álbum de su carrera, Shadows of the Dying Sun.

Esta vivencia a la sombra de los grandes del género, que en muchos casos han evolucionado hacia estilos poco reconocibles respecto al inicio de sus carreras, ha permitido a INSOMNIUM crear un estilo propio muy reconocible, incluso podría decirse influyente en grupos más underground de la escena como DARK THE SUNS o SWALLOW THE SUN (No en vano el teclista de los últimos formó parte de INSOMNIUM). En que se basa el estilo de INSOMNIUM? Lejos de ofrecer temas directos, cortos y simples, se centran en composiciones, largas y complejas en las que las atmósferas creadas por teclados y arreglos varios, juegan un papel muy importante. No menos lo es el tono de las voces harsh, menos roto que lo que estamos acostumbrados a oír y que combinado con algunas voces limpias, dotan de un tono diferente a la música de INSOMNIUM.

Todo lo anterior es lo que dota a su sonido de una melancolía que en principio parece difícil de lograr sin voces femeninas, violines, cellos y diferentes instrumentos de cuerda que otras bandas usan para conseguir este efecto. Precisamente es lo que han querido explorar con su nuevo trabajo, su lado más melancólico y melódico, lo que lo distingue de los anteriores. Un refuerzo en las voces limpias, composiciones más lentas y riffs de guitarra sencillos, con teclados que ayudan a la ambientación, aunque estos últimos ni mucho menos son predominantes.

Si de algo podían adolecer sus anteriores trabajos era de tener una cierta linealidad, los temas eran buenos pero todos bastante semejantes entre sí. Shadows of the Dying Sun es sin duda su disco más variado ya que si bien, todos sus temas son una oda a la tristeza y a la desesperación, hay en ciertos momentos en los que pueden transmitir lo contrario. De los temas que pueden considerarse más potentes, están el single Ephemeral, la que más puede sonar también a death melódico clásico, Black Heart Rebellion, con influencias del black melódico o Collapsing Words, con influencias de la época del Damage Done de DARK TRANQUILLITY. En el lado contrario, nos encontramos temas como Lose To Night, casi una balada dónde predominan las voces limpias, toda una rareza de su carrera musical, While We Sleep, que tiene muchos cambios de ritmo pero en el que predomina la pausa, muy similar a otro posterior, The Promethean Song, que también incluye muchos cambios de ritmo y voces limpias (en algunas partes son incluso susurros).

Poco más que añadir a un nuevo disco de un grupo que empieza a tener el halo de banda de culto y que incluye un nuevo motivo para así considerarlo con Shadows Of The Dying Sun, que mantiene la línea de los trabajos anteriores pero al que se da un pequeño giro, potenciando ciertos elementos en contra de otros, manteniéndose fieles al estilo musical que les caracteriza y les hace diferentes al resto de bandas.