Por Ashborne
1. Cornucopia
2. Figure it Out
3. Ching Chime
4. Butterfly
5. Harakiri
6. Occupied Tears
7. Deafening Silence
8. Forget Me Knot
9. Reality TV
10. Uneducated Democracy
11. Weave On
Por lo que veo Serj Tankian no debe tener ningún momento de relax. Además de ser el líder de los afamados System of a Down también produce discos para otros grupos, dirige su propio sello discográfico y esta envuelto en cualquier actividad política que defienda sus ideas. No contento con todo eso, el medio armenio medio americano ha revelado que tiene planes de lanzar 4 discos este 2012. Cada uno de estos discos pertenecerá a géneros diferentes: jazz, electrónica y orquestal, y este “Harakiri” es el escenario perfecto para todo esto.
Poco a poco Serj se va acercando hacia un sonido mucho mas orientado al rock directo y sin florituras, y en ello este “Harakiri” es su intento más accesible hasta el momento. Ya la primera “Cornucopia” establece el estado de ánimo para todo el disco: rápida, limpia y con la cantidad justa de indignación escondida entre las letras. “Figure It Out” es quizás una de las mejores canciones de este redondo, que con sus guitarras veloces, el doble bombo y unas líneas de bajo llenas de barro es el mejor intento hacia un sonido Megadeth que se ha hecho en mucho tiempo.
Quienes temían que la experimentación seria dejada de lado en este lanzamiento no tienen nada que temer, ya que las ideas dementes de Tankian están presentes en canciones como “Ching Chime” o “Deafening Silence” (guitarras flamencas incluidas). Si hay quizás algo que objetar a Tankian esta vez esto se encuentra alojado en las letras, que tiran en mas de una ocasión de clichés creados por el propio artista: quejas sobre los reality shows, la democracia mal practicada, la prensa americana y la ocupación de países extranjeros…si, es lo que se espera que salga de la boca de Tankian, pero a día de hoy es muy predecible.
En resumen estamos ante un buen álbum que refleja el progreso sonoro de Serj Tankian como músico. Si System Of A Down hacían que las canciones de sus primeros discos sonasen como accidentes fortuitos que acababan bien, el sonido aquí creado es objeto de varias horas de ensayo, a especie de fórmula bien creada y medida. Es lo que hacen los músicos cuando gozan de buena habilidad y un buen presupuesto.