Texto: Mariano Bacigaluppi
Fotos: Mariano Bacigaluppi
Promotor: Rock n Rock
Lo primero que se me vino a la cabeza al acudir al concierto fue la imagen del mismo recinto, pero una década atrás. Todavía podía vislumbrarse el Manzanares desde la puerta de la sala, el cartel era otro (aquella vez fue Stratovarius + Rhapsody + Sonata Arctica) y sobretodo la asistencia era infinitamente mayor, hasta el punto de colgar el cartel de Sold Out. Entre eso, Mayo del 2000 y el concierto en cuestión, Enero del 2010, han pasado cerca de diez años y muchas pero muchas cosas han cambiado.
Stratovarius sigue siendo cabeza de cartel, pero después de los problemas en el seno de la banda, algunos discos no tan afortunados, la incorporación de nuevos integrantes y, sobre todo, que el Power Metal ya no está en boga ni tiene tantos seguidores como en aquella época, creo que son todos esos factores para justificar la pobre asistencia de ayer por la noche en la madrileña Sala La Riviera. A duras penas, se llegaba a la mitad del recinto.
Claro, a esto sumémosle que en el cartel del 2000, la banda finlandesa estaba en la cresta de la ola, en el tope de su popularidad, más dos interesantes aditivos en el cartel. Teníamos a los italianos de Rhapsody, que con su segundo disco se habían decidido a salir de gira por primera vez en su vida, después de causar una autentica sensación y a unos jovencísimos Sonata Artica que habían sorprendido a todos con su álbum debut y que todos sabemos hasta donde han llegado a día de hoy.
Dos lustros después, Stratovarius siguen siendo los actores principales, pero creo que el resto del reparto no llega a ser tan atrayente como antaño. Por que si bien, los que abrieron la noche, fueron unos también jovencísimos fineses llamados TRACEDOWN, hay que decir que calidad no les falta más aún sabiendo que promedian los veinte años de edad, pero mi pregunta es.. ¿Cuántos de los presentes conocían o habían escuchado a la banda? Creo que para la inmensa mayoría eran unos desconocidos, que dieron un auténtico conciertazo y que matizaré más tarde. Los otros en escena fueron los multinacionales MYSTIC PROPHECY, una banda que cuenta con seis discos y casi diez años en escena pero que no son lo suficientemente conocidos en España como para atraer gente.
¿El Power Metal pasó de moda? ¿Cada vez hay menos interés en las nuevas generaciones? ¿Cuestión de dinero y selección de conciertos? ¿Todo tiempo pasado fue mejor? Creo que son incógnitas que no sólo yo me planteo, sino creo que muchos de vosotros que estaréis leyendo esto y llevéis muchos años en el “rollo”.
Después de este ladrillo sentimentaloide, pasaré a desarrollar la crítica. Las puertas del lugar se abrieron cerca de las 18.45hs y se veía muy poca gente haciendo la cola y entrando a primera hora, cosa que por suerte fue a más con el correr del tiempo. Así es, que a las 19.10hs y desde Finlandia saltaron en escena unos mancebos TRACEDOWN. Estos chicos hace poco más de dos meses ya habían tocado por la península con otra gira de la mano de Ensiferum, cuentan con dos discos editados y obviamente basaron su presentación en tocar canciones de ambos larga duración. Decir que sorprenden muchísimo verles arriba del escenario, es realmente impactante ver al batería Perttu Kurttila de tan sólo veinte años de edad, con esa soltura y esa perfección en cada pegada, al igual que al guitarra Tuomas Yli-Jaskari clavando los solos y con un sonido muy cristalino. Antti Lappalainen, su vocalista, alterna entre grunts y voces limpias. En los gruñidos nos recuerda mucho a sus compatriotas de Children Of Bodom, incluso el sonido de la banda va en esa dirección y será seguramente su máxima influencia, en cambio en las partes limpias, es donde le noté algo bajo. No tenía la suficiente potencia e incluso desafinaba bastante cada vez que optaba por esas vocalizaciones más melódicas.
Estuvieron arriba del escenario poco más de media hora y tocaron canciones como “Justice For None”, con una actuación increíble de su teclista Vili Itäpelto. “In Your Name” fue otra de las que sonó además se “The Forsaken” y por último la buenísima “Without Walls”.
Con un rápido cambio de escenario, la segunda banda de la noche estaría por hacer su aparición. MYSTIC PROPHECY tuvo entre sus filas al famoso guitarrista Gus G., actualmente en Firewind y, a su vez, girando con Ozzy Osbourne. Múltiples cambios en su formación, seis discos en su haber y una década de existencia, este sería su desembarco en tierras hispanas por primera vez. Los comandados por el vocalista griego R.D. Liapakis dieron un muy buen show, plagado de energía, contundencia y lamentablemente problemas técnicos con su guitarra solista Constantine, a tal punto que 3 canciones antes del final se fue del escenario para volver en la despedida y porque el otro guitarra, Markus Pohl, le cedió su instrumento. Una verdadera pena no haber podido escuchar en plenitud a ese buenísimo guitarra helénico.
En su setlist, cercano a los cuarenta minutos, cayeron canciones como “Across The Gates Of Hell” con un doble bombo alucinante regalado por el batería Stefan Dittrich, un zurdo batería que dejo a más de uno boquiabierto por su calidad y pegada infernal. Otra que sonó fue la rapidísima “Dark Forces”, con el bajista Connie Andreszka haciendo un estupendo trabajo. El vocalista R.D. Liapakis no paraba de animar a los presentes, que pese a no conocer las canciones respondieron bastante bien. Otra de las canciones que tocaron fue la veloz “We Kill! You Die!” y la poderosa “To The Devil I Pray”.
El vocalista anunciaría que quedaban las dos últimas canciones de su actuación y una de ellas sería una versión. Y así fue como se marcaron un excelente cover del “Paranoid” de Black Sabbath. Eso movió e hizo animar al público a raudales preparándolos para su partida. La canción seleccionada para decir adiós fue “Savage Souls”. Una gran despedida de una gran banda, que como dije anteriormente se vio empañada por los problemas de su guitarra, una verdadera pena sin dudas.
Media hora tuvimos que esperar para ver el plato fuerte de la noche, lo que todos estábamos esperando, STRATOVARIUS. Tuve la suerte de verles el último verano cuando dieron un corto pero intenso concierto en el zaragozano Metalway Festival y dejaron un excelente sabor de boca, tocando casi todos éxitos de la banda y, en definitiva, lo que la gente quería escuchar y eso fue lo que hicieron también en La Riviera. Si bien venían a presentar su última entrega discográfica ‘Polaris’, del que incluyeron tres canciones en el setlist, tocaron todas su obras cumbres.
Pocos minutos después de las 21.15hs abrieron fuego con una de sus mejores canciones “Destiny”. Tuvieron que pasar diez años para volver a escucharla en directo y sonó realmente grandiosa. Jörg Michael escudado detrás de una transparente batería marcaba el presto ritmo de la canción y, cómo no, bien acompañado del divertido teclista Jens Johansson. Siguieron con la misma tónica y metiéndose en el bolsillo al público escenificaron “Hunting High And Low”. Como durante todo el concierto, el bajo de Lauri Porra sonó categórico y sinceramente a la hora del solo de guitarra nadie echó de menos a Timo Tolkki. El papel Matias Kupiainen durante todo el concierto fue grandioso, imprimiendo a cada instante muchísimas ganas y entusiasmo… vamos… la antítesis de su predecesor, que últimamente era el rey del pasotismo (salud mental aparte).
Los éxitos siguieron saliendo a la luz y así llegó el momento del speedico himno “Speed Of Light” y a posteriori el turno de la determinante “The Kiss Of Judas”. Cuatro canciones ejecutadas y todos rendidos ante los pies de la banda proveniente de Finlandia. Como ya he dicho, venían a presentar su último disco llamado ‘Polaris’ y el momento del primer corte de ese disco había llegado. “Deep Unknown” en directo suena realmente bien y es porque tiene todos los condimentos de las canciones que llevaron a la banda a la fama. O sea, una sólida base rítmica desde la batería y el bajo, una melódica línea de teclados, gran solo de guitarra y una asombrosa voz. Eso es lo que los fans de la banda esperan escuchar, nada de experimentaciones y en ‘Polaris’ por suerte hicieron un acercamiento a esas míticas canciones de antaño.
“A Million Light Years Away” fue la siguiente en sonar y luego Lauri Porra se quedaría en el escenario para degustarnos con un solo acompañado por el teclista Jens Johansson. Éste último sería el encargado con el piano de hacer la introducción de “Winter Skies” y así fue como sonó otra canción de su última entrega discográfica. Después continuaron con la acelerada “Phoenix” y con la excelente “Forever Is Today”. Otro bombazo para el directo editada en ‘Polaris’. Después de un nuevo solo del bajista y ésta vez acompañado del guitarra Matias Kupiainen vendría una de las más vitoreadas y festejadas canciones de la noche. “Paradise” sonó a gloria.
Como durante todo el show, el papel del vocalista Timo Kotipelto fue sublime. Llegando a todos los tonos e interactuando como es su costumbre con el público, agradeciendo a cada instante. Lo siguiente sí que fue una sorpresa. El propio vocalista anunciaría que la canción que iban a tocar hacía mucho tiempo que no la tocaban y, es más, aún no la habían tocado en lo que va de gira europea. “Against The Wind” fue avasalladora. Sinceramente fue genial volver a escucharla y sonando categórica. Quedaría una intensa interpretación de “Eagleheart” y la banda se retiraría del escenario.
En ese viejo juego que es la música, todos sabemos que las bandas vuelven al escenario para ejecutar eso bautizado como bises. Y que bises se guardaron en la manga… La magnífica y tierna balada “Forever” fue la primera canción de las tres que tocarían antes de su partida. Inmediatamente ejecutaron la rapidísma “Father Time” y el adiós definitivo fue con otro de sus himnos, “Black Diamond”.
Cien frenéticos minutos que entran tranquilamente en la categoría de CONCIERTAZO. Una pena que la sala no estuviera llena como hubiera ocurrido hace algunos años, pero eso no pareció importarle a la banda, porque lo dieron todo y se llevaron el mejor de los aplausos y la mejor de las ovaciones.
No quisiera finalizar la crónica sin agradecer a la Promotora RockNRock y en especial a Ana Laballo por las acreditaciones…. ¡¡¡ MUCHAS GRACIAS !!!
FOTOS: http://www.goetiametal.com/cronicas/stratovariusenmadrid2010.html