Por Xavier Vidal, batería de Reaktion.
No estaba previsto grabar un álbum este 2021. Sabíamos que no queríamos tardar cuatro años, que es el tiempo que pasó entre Blackmailed Existence y Learning to Die. Pero claro, la pandemia, como a todo el mundo, también a nosotros nos hizo cambiar los planes.
El confinamiento de marzo del 2020 nos pilló en plena gira peninsular, que se tuvo que cancelar y tuvimos que volver a casa precipitadamente y cuando aún quedaban tres conciertos por hacer. Así que, sin poder hacer conciertos de presentación del último álbum, publicado en agosto del 2019, teníamos dos opciones: esperar, sin hacer nada, a que todo pasara, o ponernos a componer otro trabajo. Optamos por esto, y haciendo de la necesidad virtud, encerrados sin poder salir a tocar, escogimos trabajar en otro
disco.
En junio, ya libres de confinamiento, volvimos al local de ensayo, y en septiembre ya cerrábamos la fecha para entrar al estudio, ocho meses después. Menos de dos años después de grabar “Learning to die”, poco tiempo para una banda no profesional, cuyos miembros tienen otras ocupaciones. En pocos instantes pensamos en la rabia y la pena que nos daba que, tras haber estado caso cuatro años trabajando en un disco, casi no lo pudimos presentar en vivo. Estos pensamientos fueron suficientemente breves como para que no nos afectaran, porque si dejábamos que se instalaran en nuestras mentes, había el riesgo de que se enquistaran. En junio nos pusimos manos a la obra. Hay cosas que cambian y otras que no.
¿Cosas que no cambian?
Volver a grabar en Axtudio, donde ya hicimos los dos anteriores discos. En mi caso, además había grabado los dos discos de Vivid Remorse, The seed of malaise en el 2010 y Down to the wire en el 2012. Así pues, hace más de 10 años que conocemos al técnico del estudio, Mr. Ax, y ya sabemos que trabajar con él da una tranquilidad y confianza sin igual, además de que es una garantía de producciones excelentes.
¿Cosas que cambian?
En esta ocasión hemos trabajado en el álbum los mismos miembros que grabamos el anterior, con lo cual no solo nos conocemos mejor, sino que ha habido oportunidad de que todo el mundo aportara más. La base del estilo de Reaktion la marca la composición de los riffs por parte de Gufy, pero en esta ocasión Álvaro de Prado, el guitarra solista, ha compuesto un tema entero, además de aportar muchas ideas para varios más. Además, y por primera vez, hemos estado realizando demos de los temas que íbamos componiendo, para poder hacer escuchas más detalladas y, así, poder rectificar y corregir con más detenimiento.
Muchas veces los cambios en las composiciones antes de grabar venían marcados por el hecho de que tocábamos en vivo temas que aún no estaban grabados. En vivo es donde mejor ves si un tema funciona o no, y muchos cambios en las composiciones vienen de haberlos tocado en directo. Cuatro temas de Learning to die los estuvimos tocando en la primera gira con SDI en octubre del 2018. En esta ocasión, por razones obvias, no hemos podido tocarlos en directo, así que hemos tenido que duplicar ensayos y hacer demos para poderlas escuchar más veces y poder ir realizando los cambios en los temas para que fueran lo mejor posibles antes de grabarlos.
Por mí parte, otra de las cosas que no cambiaron fue la tradición de llevar una camiseta del “black album” de Metallica el primer día de estudio. Desde que vi el documental “A year and a half in the life
of…” quise grabar un disco, así que siempre, en los cinco álbumes que he grabado, he usado una camiseta de ese álbum, a modo de homenaje, y por qué no decirlo, algo de superstición. La tengo desde hace mucho tiempo y a juzgar por el color uno podría pensar que el disco se llama “grey album”.
Gracias a las demos que hizo Álvaro, para mí fue más cómodo grabar esta vez, ya que lo he hecho escuchando de fondo la guitarra y el metrónomo, mientras que en los discos anteriores tenía como referente una guitarra más “robótica”, la que sonaba en las tablaturas que escribió Gufy con el GuitarPro. Escuchar un sonido más real ha facilitado para mí la grabación, porque me ha permitido meterme mejor en situación. He grabado dos tomas de cada tema el primer día, mientras que el siguiente ha sido para regrabar algunas partes y pulir detalles. Estoy contento de cómo han ido las dos primeras jornadas, y las ansias de que el disco llegue a la gente aumenten.
Son muchas horas de estudio, muchas horas en las que parece que no haces nada, pero pasan rápido. Ambiente relajado y muchas anécdotas con Gufy y Mr. Ax, que va repasando lo grabado. Mientras espero a ponerme los auriculares y repetir algunas partes, vamos pensando en los mil detalles que rodean el disco: el título, en concepto para la portada y mil cosas más.
En cada álbum ha habido una evolución pero siempre manteniéndonos fieles a nuestro estilo. En cada disco ha habido un poco más de expansión en diferentes direcciones… Por una banda, cada vez ha habido más tralla. Por otra, más melodía. Y, por ello, cada vez el reto de poder combinar ambos aspectos es mayor. Es como estirar un chicle en varias direcciones…cada vez más, pero evitando que se rompa. Pero estoy seguro que lo hemos conseguido. Este disco es donde hay más temas rápidos y más blast beats que en cualquier disco que hayamos compuesto. Por otro, seguimos potenciando que las melodías vocales sean recordables y que los temas enganchen. “Vivid Remorse” con esteroides. Así definió nuestro técnico, Mr. Ax, a Reaktion. Pues bien, ahora, aún más. Más brutalidad y a la vez más simplicidad en los estribillos, lo cual no quiere decir facilidad. Por supuesto, no nos hemos querido repetir, y hay muchos elementos nuevos. El tema de Álvaro tiene un rollo sureño y panteril que le da un matiz nuevo a Reaktion, mientras que hemos introducido otros elementos, como arpegios en temas cuya dinámica va en
aumento.
Para esta grabación he usado un kit algo diferente al que utilizo normalmente. Siempre uso toms de 10 y 12, y ahora he usado de 13 y 14 pulgadas. Por contra, queremos que la producción sera más cristalina y no tan robusta como la de “Learning to die”, con lo cual será otro reto para Mr.Ax: que los toms suenen más nítidos y “agudos” aun habiendo usado parches de tamaño superior al anterior disco. En cuanto a los platos, los que que he usado siempre desde el Down to the wire: crashes de 16 y 18, splash de 8 y china de 18, y unas baquetas 5A. Algo pesadas y que a veces dificultan los redobles rápidos, pero es cuestión de acostumbrarse.
En un par de días abré acabado, con la satisfacción de haber dejado registrado el trabajo (y la ilusión) de horas y horas de composición, ensayos y prácticas. Los nervios dejarán paso a la relajación, y podré disfrutar del resto de días en el estudio con la tranquilidad de que ya he hecho mi parte. Será después el turno para que Gufy grabe las rítmicas.
Continuará…