[crónica] Sorprende que más de una década después de su disco de estreno, una propuesta tan (aparentemente) minimalista como la de ARIZONA BABY, no sólo siga dando frutos, sino que mantiene su esencia y logran mantenerla en alza. “Secret Fires”, su nuevo trabajo, es la coronación de la carrera de los vallisoletanos, y si a ello le sumamos su directo, no nos cabe ninguna duda que su neofolk se convierta en un referente en nuestra escena.