The Smashing Pumpkins – Oceania

Por Ashborne

1. Quasar
2. Panopticon
3. The Celestials
4. Violet Rays
5. My Love is Winter
6. One Diamond, One Heart
7. Pinwheels
8. Oceania
9. Pale Horse
10. The Chimera
11. Glissandra
12. Inkless
13. Wildflower

Desde que Mr. Corgan revivió a los Smashing Pumpkins en 2006 ríos de tinta han corrido entre los fans sobre si esta formación debería utilizar el glorioso nombre SP, pero es demasiado evidente que aun con James Iha, Darcy Wretsky y Jimmy Chamberlain Smashing Pumpkins siempre fue cosa de Billy Corgan. Ya desde aquel dulce 1993 y su “Siame Dream” han habido rumores que apuntan a que Billy Corgan se apodera de todos los aspectos musicales de la banda, incluyendo esto retirar de sus puestos a integrantes para regrabar el mismo las partes que les corresponden según su gusto ¿Puede uno decir entonces que Smashing Pumpkins siempre fue banda de un solo músico, con mercenarios contratados? La historia no ha cambiado mucho.

Desde 2006 hemos tenido los confusos “Zeitgeist” y “Teargarden By Kaleidyscope” gota a gota. El trabajo prolífico de Corgan estaba allí, pero la calidad no era la esperada, asi que muchos se apresuraron en rezar que el calvo líder de los chicos Zero había perdido el toque y estaba arrastrando el legado hacia el abismo. Qué lástima que este “Oceania” no haya sido lo primero que hayan lanzado oficialmente después de la reunión, porque estamos ante un trabajo bastante sólido y que si puede vivir a las expectativas.

Lo bueno de “Oceania” es que se basa en una colección del sonido clásico de los Smashing Pumpkins pero con nuevos trucos. La primera “Quasar” es una bestia de canción, con varios cambios de ritmo y actitud, seguida de “Panopticon”, que también trae consigo una ola de guitarras que forman el equipo perfecto con las baterías de Mike Byrne. ¿Qué separa este lanzamiento del resto de canciones lanzadas en los últimos años? Definitivamente la producción, y el hecho de que cada músico ha tenido su espacio necesario para lucirse en sus habilidades.

El bajo de Nicole Fiorentino respira un sonido armonioso en canciones como “The Celestials” o “Pale Horse”, y también Jeff Schroeder hace lo suyo tras las seis guitarras para ponerse a la par de Corgan en cuanto a melodías: desde el sonido de rock clásico de “The Chimera” a los solos aventureros de “Inkless”, este disco posee un trabajo de guitarras admirable. ¿Baterías? Byrne es una máquina, y con 22 añitos tiene todo un futuro por delante para mejorar (a pesar de haber hecho un trabajo excepcional en “Oceania”).

Estos si son Smashing Pumpkins, y suenan como tales. En lugar de seguir arrastrando el nombre interpretando solo canciones del pasado, Billy Corgan ha entregado sobre la mesa una docena de buenas canciones para rellenar los sets de cada noche…se trata de una segunda era de una de las bandas pilares del rock n roll de los 90´s, y bienvenida sea.